Me escape, así como quiere nada me fui, a respirar otro aire, a ver agua, a estar en familia.
Surgió de la nada. Fue un cambio de planes que trajo a planes nuevos. Un cambio de planes que también sirvió para entender y ver cosas que antes no aprovechaba... algo que lleva a algo.
La tierra colorada me recibió con felicidad. No tenía encima de mi cabeza las nubes que desde mi ciudad me perseguían... el sol estaba en mi vida.
Me aventure, entre selva y pueblo, agua nuestra y agua compartida. Mezcla de idiomas. Extrañar. Amar a la distancia. Compartir con él momentos que nunca se repetirán. Porque los momentos no se repiten, nacen nuevos.
Cuatro días que parecen diez. ¿Sera el estress? ¿Ese que se dice que existe y no existe?.
Pero el agua me lo quito.
Y aún creo que esa sensación no regreso.
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